En Cali, más de 450 vendedores informales se integran a un pacto que busca ordenar la actividad comercial durante el Alumbrado Navideño y dignificar su trabajo. La iniciativa, liderada por la Alcaldía y acompañada por la Personería, tiene como objetivo garantizar espacios adecuados, seguridad y visibilidad para quienes participan de manera legal y organizada. Como parte del proceso, los comerciantes reciben capacitación en convivencia ciudadana, buenas prácticas de ventas y atención al público. Esta formación busca fortalecer sus habilidades y generar un ambiente armonioso entre visitantes, autoridades y vendedores. Además, se promueve la conciencia sobre el cuidado del espacio público y la importancia de mantener ordenadas las zonas de comercio. Con esta estrategia, se evita la saturación de las calles y se mejora la experiencia de los caleños y turistas. La inclusión y la organización se convierten en pilares de la temporada navideña en la ciudad. Así, se construye un modelo de comercio responsable y sostenible.
Mabel Lara, secretaria de Desarrollo Económico, destacó que este acuerdo no solo regula la actividad comercial, sino que también protege los derechos de los vendedores informales. Para la funcionaria, la inclusión social es prioridad y permite que todos los actores se beneficien de la temporada sin afectar el orden ni la seguridad. Los vendedores, por su parte, reconocen que el pacto les brinda estabilidad y garantías de respeto durante los días de mayor afluencia. También acceden a mejores condiciones de trabajo, incluyendo espacios demarcados, iluminación adecuada y supervisión constante por parte de las autoridades. La coordinación con la Personería y la Secretaría de Movilidad asegura que se cumplan las normas y se minimicen conflictos entre comerciantes y ciudadanos. Este modelo de regulación busca replicarse en otros eventos masivos de la ciudad. De esta manera, se consolida un equilibrio entre desarrollo económico y orden urbano.
El pacto también se enfoca en fortalecer la imagen del Alumbrado Navideño como un espacio seguro, organizado y atractivo para los caleños y visitantes. Las capacitaciones incluyen temas de atención al cliente, manejo adecuado de productos y hábitos de higiene, promoviendo una cultura de respeto y profesionalismo. Cada vendedor recibe orientación para ofrecer sus productos de manera responsable, evitando congestiones y mejorando la movilidad peatonal en las zonas del alumbrado. Asimismo, se implementan rondas de acompañamiento y supervisión durante toda la temporada, garantizando que el acuerdo se cumpla de forma efectiva. La experiencia busca que la ciudad sea ejemplo de inclusión, innovación y organización en eventos masivos. Los comerciantes valoran la oportunidad de participar de manera ordenada y sentir que su trabajo es reconocido. Este pacto reafirma la apuesta de la Alcaldía por combinar desarrollo económico con bienestar social. Así, el Alumbrado Navideño se convierte en una fiesta segura, equitativa y representativa de la ciudad.


