Un incendio forestal de grandes proporciones se ha desatado en la Reserva Natural de Chingaza, Cundinamarca, a primeras horas de la madrugada. Las llamas han afectado rápidamente miles de hectáreas de bosques y páramos, poniendo en riesgo la biodiversidad de la zona, hogar de especies como el oso de anteojos y el puma. Las autoridades locales han activado un plan de emergencia y están trabajando con brigadas especializadas para contener el fuego.
El Cuerpo de Bomberos de Cundinamarca, con el apoyo del Ejército y la Policía, ha comenzado a evacuar a las comunidades cercanas, especialmente en los municipios de Fómeque y La Calera. Las autoridades han emitido alertas rojas debido a la intensidad del incendio y la cercanía de los focos a las fuentes de agua que abastecen a Bogotá. Las primeras investigaciones sugieren que el fenómeno de El Niño y posibles quemas ilegales podrían haber contribuido a la propagación del fuego.
El impacto ambiental es alarmante, ya que la Reserva de Chingaza es vital para la conservación de la fauna andina y el abastecimiento de agua en la región. Grupos ecologistas y la comunidad piden más apoyo para los bomberos y brigadistas, quienes continúan trabajando bajo condiciones extremas para sofocar el incendio y evitar su expansión hacia áreas más sensibles.
