Anita Borrero
Una sensible disminución de las lluvias se ha producido en el departamento del Huila, acorde con las previsiones meteorológicas sobre la proximidad del fenómeno El Niño, según reportó el secretario de Gobierno y Desarrollo Comunitario del departamento, Andrés Mauricio Muñoz Leguizamo.
Los pronósticos
El funcionario dijo que el Huila se está preparando para atender la posible sequía e hizo un llamado a los organismos del agro para que se tomen las medidas adecuadas para prevenir pérdidas.
Según los pronósticos del IDEAM, se establece que la fase de inicio del fenómeno se dará entre los meses de mayo y julio de 2023, con una probabilidad del 62%. Se espera que continúe su evolución hacia las fases de desarrollo y madurez durante el ciclo de agosto a octubre de 2023, con una probabilidad del 82%. Posteriormente, se prevé su persistencia hasta noviembre y enero del 2024.
Considerando lo anterior y los riesgos asociados a este fenómeno, como altas temperaturas, probabilidad de ocurrencia de incendios forestales, afectación a sistemas productivos agropecuarios y el descenso de ríos y quebradas con incidencia negativa en el suministro de agua potable para la comunidad, resulta necesario iniciar la implementación de los Planes de Contingencia municipales y sectoriales.
Estrategias
La Secretaría de Gestión del Riesgo y Desastres es la encargada de atender estas alarmas de manera oportuna ya que la ciudad de Neiva se encuentra en alerta máxima ante este fenómeno que ha dejado más de 400 kilómetros de terreno consumido por incendios forestales. El departamento tiene varios municipios con alta vocación agrícola, donde los campesinos suelen hacer quemas para renovar o cultivar nuevamente, práctica que los expertos piden no realizar.
“Nuestro plan prioriza una respuesta rápida por parte del Cuerpo de Bomberos, y su éxito está respaldado por la vigilancia ciudadana, siempre atenta a informar sobre posibles incendios. Asimismo, se promoverá la coordinación interinstitucional y el monitoreo constante de las condiciones climáticas, con el objetivo de tomar medidas oportunas y salvaguardar la integridad de la comunidad” comentó Jorge Armando Manjarrez, jefe del cuerpo de bomberos Neiva.
Destacado: Más de 600 hectáreas de tierra con material vegetal seco han sido consumidas por el fuego.
Pie de foto: Miguel Naranjo, cuerpo de bomberos voluntarios de Neiva




