Una noche de tragedia se vivió en Pitalito, al sur del Huila, tras registrarse un accidente de tránsito en la avenida Circunvalar, que dejó como saldo la muerte de un motociclista identificado como Jesús Gabriel Vargas, un hombre oriundo del departamento del Caquetá, conocido entre sus allegados como “El Andariego”.
El hecho ocurrió el sábado en horas de la noche, cuando dos motocicletas colisionaron violentamente. Testigos aseguraron que los vehículos se desplazaban a alta velocidad, sin cascos de protección y, al parecer, bajo los efectos del alcohol. La imprudencia terminó cobrando la vida de Vargas, quien falleció en el lugar de los hechos.
Hipótesis del caso
De acuerdo con el reporte preliminar de las autoridades de tránsito, los motociclistas habrían invadido el carril contrario, lo que provocó el impacto frontal. Aunque los organismos de socorro llegaron rápidamente al sitio, poco pudieron hacer para salvar la vida del hombre.
La Policía de Tránsito adelantó el levantamiento del cuerpo y el inicio de la investigación correspondiente para determinar con exactitud las causas del accidente y establecer posibles responsabilidades penales. “Estamos verificando si hubo exceso de velocidad y si alguno de los conductores conducía en estado de embriaguez”, indicó una fuente policial.
Responsabilidad vial
El lamentable suceso ha generado consternación entre los habitantes de Pitalito y reabre el debate sobre la irresponsabilidad en la conducción de motocicletas, especialmente durante los fines de semana, cuando se incrementan los casos de siniestros relacionados con el consumo de licor.
“Cada fin de semana tenemos reportes de accidentes con motociclistas en estado de embriaguez. Es urgente reforzar los controles y la conciencia ciudadana”, expresó un integrante del Cuerpo de Bomberos del municipio.
Familiares aún no ubicados
Hasta el momento, las autoridades no han logrado contactar a los familiares de Jesús Gabriel Vargas, por lo que se ha solicitado a la comunidad compartir la información para que sus allegados puedan reconocerlo y reclamar su cuerpo.
“El Andariego” era conocido por su carácter amable y espíritu trabajador. Su fallecimiento deja una profunda tristeza entre quienes lo conocieron.
Las autoridades locales reiteran el llamado a la prudencia, uso del casco y cero tolerancia al alcohol al conducir, recordando que detrás de cada accidente hay una vida truncada y una familia en duelo.
La tragedia de Jesús Vargas vuelve a poner sobre la mesa una dolorosa realidad: la imprudencia sigue cobrando vidas en las carreteras del Huila.




