Pasaron tres días para que las autoridades confirmaran la identidad del hombre que murió en medio de un operativo policial en Saladoblanco. Se trataba de Jaider Artunduaga Muñoz, quien perdió la vida en circunstancias aún confusas, tras un procedimiento adelantado por la Policía local, en el que fue incautada un arma de fuego presuntamente modificada.
Según información preliminar, Artunduaga habría intervenido de forma violenta para evitar la captura de otro hombre involucrado en el caso, enfrentándose con un machete a los uniformados. En la reacción policial, resultó gravemente herido y posteriormente falleció.
Estallido social
La noticia del fallecimiento, sumada a la falta de información oficial durante las primeras horas, generó indignación entre los familiares y habitantes del municipio, quienes acudieron en masa hasta la estación para exigir explicaciones. Las tensiones se elevaron rápidamente, y fue necesario reforzar el dispositivo de seguridad con la llegada urgente de la Unidad de Diálogo y Mantenimiento del Orden (UNDMO), enviada desde Pitalito.
Silencio institucional
Ante la presión social y el malestar general, el comando departamental decidió trasladar a los cinco uniformados involucrados —entre ellos, un sargento— a otras estaciones del departamento mientras avanzan las investigaciones judiciales.
Hasta ahora, la Policía no ha emitido un pronunciamiento oficial sobre lo ocurrido, mientras la comunidad clama por respuestas claras frente a una muerte que dejó heridas abiertas en Saladoblanco.




