El Gobierno departamental de Cundinamarca anunció un paquete de apoyo económico para los hospitales públicos que enfrentan dificultades por deudas acumuladas y falta de recursos operativos. La medida busca garantizar la continuidad de los servicios médicos y evitar un posible colapso del sistema de salud en varias regiones.
El plan contempla la entrega de recursos para cubrir pagos atrasados a proveedores, reforzar la compra de insumos y fortalecer las áreas de urgencias y atención primaria. Además, se priorizarán los centros asistenciales de municipios con menor capacidad financiera y alta demanda de pacientes.
Las autoridades señalaron que la crisis hospitalaria se ha agudizado por los retrasos en los giros de las EPS y el aumento en los costos de atención. Con el nuevo apoyo, se espera estabilizar la operación de los hospitales y asegurar que la población no se vea afectada por cierres o suspensión de servicios.
El gobernador de Cundinamarca destacó que el fortalecimiento del sistema de salud es una prioridad y reiteró el llamado al Gobierno Nacional para avanzar en soluciones estructurales que garanticen la sostenibilidad de la red pública hospitalaria.
