Justin D. Mohn, un hombre de 33 años de Pensilvania, enfrenta cargos por asesinato en primer grado, terrorismo y abuso de cadáver. La fiscalía asegura que mató a su padre, lo decapitó y publicó el video en YouTube, acompañado de un llamado violento contra el gobierno estadounidense. Horror en Pensilvania: hijo decapita a su padre y sube el video a YouTube.
El crimen ocurrió el 30 de enero de 2024 en Levittown. Su madre, Denice Mohn, encontró el cuerpo decapitado de su esposo, Michael F. Mohn, en el baño de su casa. “Creo que grité. Estaba gritando afuera. Creo que llamé al 911”, declaró entre lágrimas durante el juicio.
El video, de 14 minutos, estuvo activo varias horas en YouTube bajo el título “Mohn’s Militia – Call to Arms for American Patriots”. En él, Justin sostiene la cabeza de su padre, lo llama “traidor” y exhorta a atacar empleados federales.
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Delirio, extremismo y armas: la ruta violenta del acusado
La fiscal Jennifer Schorn sostiene que Mohn planeó el crimen con frialdad y lo ejecutó como un acto de terrorismo interno. Disparó a su padre con una pistola recién adquirida, luego usó un cuchillo de cocina y un machete para decapitarlo.
Después del asesinato, huyó hacia Fort Indiantown Gap, una base de la Guardia Nacional de Pensilvania. Allí escaló una cerca de seis metros con un arma cargada. Portaba una memoria USB con fotos de edificios federales y supuestas instrucciones para fabricar explosivos.
El juicio también reveló que el acusado ya había publicado manifiestos antigubernamentales en internet. En una carta enviada al embajador ruso, pidió disculpas a Vladimir Putin por haberse autoproclamado “zar de América” en una publicación previa.
Juicio sin jurado y sin acuerdo: la justicia enfrenta el extremismo
El juicio comenzó el 7 de julio de 2025 en Doylestown, sin jurado. La defensa no ha propuesto un acuerdo con la fiscalía. Un experto en salud mental afirmó que Mohn presenta un trastorno delirante, pero el juez lo declaró apto para enfrentar el proceso.
Durante la audiencia, la fiscalía mostró el video original y grabaciones del 911 con gritos de fondo. El vecino James Carnley testificó que ayudó a la madre del acusado y confirmó que el cuerpo de Michael “no tenía cabeza”.
Michael F. Mohn trabajó como ingeniero del Cuerpo de Ingenieros del Ejército de EE. UU. durante 20 años. La fiscalía argumenta que su hijo lo mató como mensaje de odio hacia las instituciones federales.
Si lo condenan, Justin Mohn podría enfrentar cadena perpetua o incluso la pena de muerte bajo la ley estatal.
