El líder sindical Honorio Bonilla Bonilla, conocido por su interés por los derechos de los trabajadores en Emcali y su incansable compromiso social, fue hallado sin vida en un canal de aguas residuales al oriente de la capital del Valle. Su fallecimiento no solo ha dejado un profundo vacío en la comunidad caleña, sino también en su natal Timbiquí, Cauca, donde su figura era símbolo de orgullo.
Un líder comprometido y valiente
Bonilla, quien trabajaba en Emcali, se había destacado por su carácter y gran personalidad. Fuentes cercanas incluso indican que, antes del hallazgo, había denunciado presuntos hechos de corrupción dentro de la organización, lo que ahora genera interrogantes sobre las circunstancias que rodearon su fallecimiento.
La noticia de su muerte ha provocado una ola de indignación y dolor entre sus allegados, colegas y las comunidades que representó con tanta dedicación.
La despedida de Honorio
El sepelio fue escenario de una multitudinaria asistencia, con personas que acudieron a rendirle homenaje. Amigos, familiares y compañeros de trabajo expresaron su dolor y recordaron a Honorio como un hombre íntegro, valiente y profundamente humano. Durante la ceremonia, los asistentes alzaron sus voces para reclamar justicia y el esclarecimiento de los hechos que rodearon su muerte.
Timbiquí, sumido en la tristeza
En su natal Timbiquí, un pueblo conocido por su alegría y su música, están sumidos en la tristeza desde que se conoció la noticia. Los habitantes recuerdan a Honorio no solo como un líder, sino como un amigo cercano que siempre regresaba a su tierra en épocas especiales, o cuando el pueblo enfrentaba momentos difíciles.
Un mensaje colectivo de los habitantes de Timbiquí expresa el sentir de la comunidad: «Hoy en Timbiquí se respira tristeza. La alegría que siempre ha caracterizado a este pueblo parece haberse perdido. Honorio, te damos un adiós. Paz en tu tumba, amigo Honorio Bonilla Bonilla».
Justicia y memoria
En medio del duelo, tanto en Cali como en Timbiquí claman por justicia. Las denuncias de corrupción que Honorio habría realizado antes de su fallecimiento, encendieron las alarmas.
Mientras tanto, el recuerdo de Honorio Bonilla Bonilla permanece vivo en los corazones de quienes lo conocieron. Su legado como luchador incansable, su carisma y la calidad humana que lo caracterizaba seguirán siendo una inspiración para muchos.
Así lo expresó uno de sus amigos más cercanos: «Pantalión, Negro, Bacán… como te decíamos de cariño, siempre serás parte de nosotros. Que el Creador te guarde un espacio en su trono, porque lo mereces por ser la gran persona que fuiste. Paz en tu tumba, amigo».
