Un hecho lamentable se registró en Santander de Quilichao, al interior de un establecimiento ubicado en el barrio Llano Grande, zona urbana del municipio. En ese lugar, dos hombres fueron asesinados con armas de fuego y una mujer resultó herida durante el ataque, cuyas causas aún son materia de investigación.
Las víctimas fueron identificadas como Luis Fernando Erazo y Yeison Guevara, ambos originarios del departamento de Nariño. Aunque no nacieron en el municipio de Cumbitara, mantenían allí vínculos cercanos y eran ampliamente reconocidos por la comunidad local.
La tercera persona afectada es una mujer que se encontraba en el mismo establecimiento al momento del hecho. Su identidad no ha sido revelada oficialmente, y permanece bajo atención médica debido a las heridas sufridas durante la agresión armada.
Hasta el momento, no hay información clara acerca de los motivos ni las circunstancias en las que se desarrollaron los hechos. Las fuerzas del orden se desplazaron al sitio para realizar los procedimientos correspondientes.
Las primeras diligencias de las unidades judiciales buscan recopilar indicios que permitan establecer el contexto del crimen, así como posibles responsables. Por ahora, todo lo relacionado con este caso continúa bajo análisis por parte de los organismos competentes, quienes han iniciado una investigación formal.
Familiares, amigos y habitantes del municipio nariñense expresaron su tristeza a través de mensajes en redes sociales y otras plataformas digitales. Varios residentes lamentaron la pérdida de estos hombres, resaltando sus cualidades personales y el impacto que dejaron en su comunidad natal.
El municipio afectado decretó duelo simbólico para honrar la memoria de los fallecidos, mientras esperan respuestas oficiales sobre lo sucedido. La población clama por justicia y mayor presencia institucional en los territorios que enfrentan situaciones de orden público preocupantes.
Desde diferentes sectores sociales se han elevado voces que piden medidas urgentes para detener la escalada de violencia que golpea a varias regiones del país. La situación también pone en evidencia la necesidad de fortalecer los mecanismos de seguridad y prevención, especialmente en zonas vulnerables.
