Un hecho sin precedentes tuvo lugar en el interior de un hospital de Nariño. Dos hombres, que habían sido heridos en un ataque de sicarios y estaban hospitalizados en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), fueron tiroteados por hombres armados delante de todo el personal médico.
Los momentos de pánico se vivieron exactamente en el cuarto piso del Hospital San Andrés de Tumaco, hasta donde llegaron los asesinos para completar su objetivo criminal. De acuerdo con la información suministrada por las autoridades policiales, las víctimas fueron identificadas como Jorge Luis Quiñonez Cabeza y Miguel Ferney Palacios Montaño.
Testigos del hecho declararon que desde muy tempranas horas del día, los delincuentes hacían recorridos por las instalaciones del hospital haciendo preguntas sobre el paradero de los dos hombres heridos, pero que al no obtener respuestas desaparecieron.
A los pocos minutos regresaron, pero al parecer con información fidedigna porque se dirigieron directamente a la UCI del centro médico. Allí interrogaron al personal médico y tras confirmar que las víctimas estaban hospitalizadas, procedieron a disparar contra sus cuerpos.
El ataque armado fue perpetrado en presencia de personal médico y paramédico, pacientes y familiares que vivieron momentos de angustia.
