Las autoridades revelaron las identidades de dos presuntos subversivos que perdieron la vida durante un enfrentamiento armado con soldados del Batallón de Alta Montaña número 5 en la vereda La Ye, ubicada en el municipio de Sevilla, Valle del Cauca. El combate, que tuvo lugar en horas de la tarde en días pasados, involucró a un grupo armado que supuestamente hace parte del Frente 57 Yaír Bermúdez, una de las estructuras del ELN que opera en la región.
Los fallecidos fueron identificados como Fredy Alexander Mera Portillo, de 34 años, oriundo al parecer del municipio de El Tambo, en el departamento de Nariño, quien presuntamente se desempeñaba el cargo de cabecilla de finanzas del grupo subversivo, y Javier Montoya Bedoya, un joven de 18 años, quien, según las autoridades, había sido reclutado por el grupo armado en el municipio de Sevilla, posiblemente con fines de integración a la estructura criminal.
El enfrentamiento se produjo en un área rural de la vereda La Ye, donde las tropas del Batallón de Alta Montaña número 5, en el marco de operaciones de control territorial, lograron al parecer neutralizar a los individuos tras un intenso intercambio de disparos. Durante el operativo, las autoridades también incautaron material de guerra, como armas de fuego y municiones, así como equipos de comunicación que podrían proporcionar más detalles sobre las actividades del grupo armado en la zona, fortaleciendo la estrategia de inteligencia del Ejército.
Este resultado operativo hace parte de los esfuerzos continuos del Ejército Nacional para garantizar la seguridad y el control en regiones de difícil acceso, donde grupos armados ilegales suelen operar con impunidad. Las autoridades han destacado la importancia de este tipo de acciones para debilitar las estructuras criminales que amenazan la estabilidad de las comunidades rurales
A pesar de la neutralización de estas dos personas que las autoridades informaron serían dos subversivos, el enfrentamiento ha generado inquietud entre las comunidades cercanas, quienes han expresado su temor ante la creciente presencia de grupos armados ilegales en el sur del país. No obstante, la respuesta del Ejército es un recordatorio de la importancia de proteger a la población civil y garantizar el orden en las zonas rurales que, en ocasiones, han sido olvidadas por el Estado.




