Un insólito y casi surrealista hecho ocurrió en las costas del Caribe colombiano cuando Adrián Simancas, un deportista aficionado al kayak, fue tragado por una ballena mientras practicaba su actividad favorita en las aguas cercanas a Cartagena. Afortunadamente, el colombiano logró sobrevivir a este extraordinario encuentro, y hoy comparte su increíble experiencia con los medios.
El hecho ocurrió el pasado 12 de febrero, cuando Simancas, quien se encontraba en su kayak disfrutando de la calma del mar, fue repentinamente devorado por una ballena jorobada que emergió de las profundidades. Según contó el propio Simancas, la ballena lo engulló con un movimiento repentino, tragándose su kayak y llevándolo en su enorme boca.
“Fue algo que no puedo describir con palabras. Estaba tranquilo, remando, cuando de repente sentí que algo me arrastraba hacia abajo. Todo pasó en cuestión de segundos”, relató Adrián entre risas nerviosas y asombro. Según su testimonio, la ballena, al parecer, no intentó atacar deliberadamente, sino que, al abrir su boca para alimentarse, accidentalmente lo incluyó en su camino.
A pesar de la enorme sorpresa y el temor de ser tragado completamente, Simancas, un hombre de gran resistencia física, logró mantener la calma y, con astucia, se soltó del kayak cuando la ballena comenzó a nadar hacia la superficie. Utilizando sus habilidades de supervivencia en el mar, Adrián consiguió salir ileso de la boca del mamífero marino, tras una lucha de unos minutos en las aguas abiertas.
“Fue un momento de pánico, pero nunca perdí la esperanza. Sabía que si lograba mantener la calma, podría salir de ahí. Después de unos segundos, la ballena dejó de nadar hacia las profundidades y me soltó. Afortunadamente, estaba lo suficientemente cerca de la superficie para salir rápidamente”, añadió.
El valiente colombiano fue rescatado poco después por un grupo de pescadores que se encontraba cerca de la zona. A pesar del tremendo susto y algunos golpes superficiales, Adrián resultó ileso y fue trasladado a la costa, donde pudo recibir atención médica y relatar su increíble experiencia.
Los expertos marinos explicaron que los encuentros de este tipo, aunque raros, no son imposibles, ya que las ballenas, al alimentarse, a veces ingieren grandes cantidades de agua junto con pequeños peces y criaturas marinas, lo que podría haber causado la succión accidental del kayak.
Adrián Simancas, ahora un verdadero superviviente de este fenómeno natural, se muestra agradecido y, aunque asegura que no volverá a practicar kayak en ese lugar por un tiempo, su historia ha cautivado a todos, desde los amantes de los deportes extremos hasta los más escépticos. Sin duda, una experiencia que se sumará a las leyendas del mar y que permanecerá en la memoria colectiva del Caribe colombiano.




