La reforma laboral es prácticamente un hecho. Este viernes 20 de junio, el Senado y la Cámara de Representantes aprobaron el informe de conciliación del proyecto, dejando solo pendiente la firma del presidente Gustavo Petro para que se convierta oficialmente en ley de la República.
Los equipos negociadores de ambas cámaras acordaron acoger el texto que fue aprobado en el cuarto y último debate en la Plenaria del Senado. Esta versión final del articulado fue resultado de consensos entre todos los partidos políticos y también incorporó algunas observaciones del sector privado.
Durante el proceso, el presidente Petro había manifestado que, si el Congreso aprobaba la reforma laboral, retiraría el decreto con el que convocó a una consulta popular sobre el tema. Sin embargo, esa promesa estaba condicionada a que se aprobara el texto que salió de la Cámara de Representantes en el segundo debate.
“El presidente dijo que una vez aprobado el proyecto, derogaría el decreto con el que se convocó la consulta (…) Esto debe hacerse con la firma de los ministros, y pueden estar seguros de que así será”, aseguró el ministro del Interior, Armando Benedetti.




