Un grave hecho de intolerancia se presentó en las últimas horas en una municipalidad del Meta, cuando dos hombre de 24 y 26 años se agredieron mutuamente en medio de una riña callejera que los dejó heridos y capturados.
Pelea
La pelea se presentó en plena vía pública de la calle 4 con carrera 8a del barrio Centro, ubicado en el municipio de San Carlos de Guaroa, hasta donde llegaron las autoridades que fueron alertadas por la comunidad sobre los hechos.
De acuerdo a los testigos del caso, los hombres involucrados que fueron identificados como John Jairo López Rodríguez y José Daniel Barros Muñoz, al parecer se encontraban departiendo, cuando surgieron diferencias personales entre ellos.
Discusión
Dicen las personas, que los hombres comenzaron una fuerte discusión entre ellos que los llevó a agredirse verbalmente con palabras de grueso calibre, sin embargo, estas subieron de tono y pasaron a ser empujones, por lo que los ánimos se fueron caldeando de a poco.
Finalmente los involucrados comenzaron a agredirse físicamente, al punto que la comunidad dio aviso a las autoridades, pues cerca de la zona de la pelea, se encontraba una patrulla de la institución que rápidamente atendió el caso.
Riña
Al parecer, los hombres ya se estarían golpeando con objetos contundentes y se encontraban enfrascados en una violenta pelea, por lo que al llegar las autoridades, los dos fueron reducidos y capturados.
Sin embargo, ambos presentaban diversas heridas, por lo que fue necesario su trasladado a un centro asistencial para su correcta valoración y atención médica, pues ambos presentaban politraumatismo, contusiones, hematomas y laceraciones en diferentes partes del cuerpo.
Atendidos y capturados
Una vez se encontraban estables, su captura fue legalizada y las autoridades procedieron a arrestarlos, por lo cual fueron llevados a la Unidad de Reacción Inmediata donde quedaron a disposición de la Fiscalía General de la Nación, seccional 11 del municipio de Acacías.
Los dos involucrados, deberán comparecer ante un juez de la Nación que los juzgara por el delito de lesiones personales reciprocas y de hallarlos responsables podría condenarlos a pagar entre seis a 10 años de prisión y una multa económica.




