A pesar de un ataque israelí que dejó muertos entre líderes de Hamas en Qatar, el grupo insiste en que sus condiciones para el cese del fuego en Gaza siguen siendo innegociables: retirada total de Israel, intercambio de prisioneros, ayuda humanitaria y reconstrucción.
Tras un ataque israelí en Doha que mató a cinco miembros de Hamas, incluyendo al hijo de un negociador clave, el grupo reafirma sus demandas: alto al fuego completo, retirada militar, prisioneros y ayuda. Negociaciones diplomáticas enfrentan nuevo obstáculo.
Doha, 11 de septiembre de 2025.
Un bombardeo israelí dirigido contra miembros del liderazgo de Hamas que se encontraba participando en negociaciones en Doha, Qatar, no alteró las condiciones que el grupo permanece exigiendo para un alto al fuego en Gaza.
El ataque dejó al menos cinco miembros muertos, entre ellos el hijo de Khalil al-Hayya, un negociador veterano del grupo. Aunque la acción se produjo en medio de la revisión de una propuesta de cese del fuego presentada por el primer ministro qatarí, Hamas aseguró que sus condiciones no son negociables.
Exigencias de Hamas
- Alto al fuego completo.
- Retirada militar de Israel de los territorios ocupados de Gaza.
- Intercambio de prisioneros por los rehenes retenidos.
- Entrada sin restricciones de ayuda humanitaria.
- Plan serio y efectivo de reconstrucción del enclave.
Posición de Israel
El primer ministro Benjamin Netanyahu ha manifestado que cualquier acuerdo debe incluir:
- La liberación total de los rehenes.
- Que Hamas se rinda o acepte condiciones muy estrictas.
Reacción internacional
- Estados Unidos reaccionó criticando el ataque como contraproducente para las negociaciones.
- Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos y la Unión Europea también expresaron su desaprobación, alertando que tal acción podría obstaculizar la paz.
- Qatar reafirmó su papel como mediador e insistió en que el ataque no debe desviar los esfuerzos diplomáticos hacia una solución negociada.
Estas negociaciones se enmarcan en el creciente cansancio internacional por el prolongado conflicto entre Israel y Hamas, que ha dejado miles de víctimas civiles, destrucción masiva en Gaza y una crisis humanitaria sin precedentes. El papel de mediadores como Qatar y Egipto, y de organismos internacionales, ha sido clave para sostener los esfuerzos de alto al fuego.
El bombardeo en Doha tensiona aún más un panorama diplomático frágil. Mientras Hamas mantiene sus condiciones, la comunidad internacional observa con preocupación: los ataques selectivos, aunque pretendan debilitar al liderazgo, pueden socavar la confianza y hacer que los altos al fuego queden en promesas incumplidas. La clave estará en la capacidad de los mediadores para evitar un nuevo ciclo de escalada, y que todos los actores acepten concesiones mutuas antes de que el conflicto siga cobrando más vidas.
