Julián Quiñones dijo porque no habrían ganado la última final contra Nacional.
La derrota del Deportes Tolima en la final de la Liga BetPlay 2 2024 frente a Atlético Nacional sigue generando repercusiones, seis meses después del amargo desenlace en Medellín. El conjunto ‘Pijao’, que empató 1-1 en la ida disputada en Ibagué el día de su aniversario 70, cayó 2-0 en el Atanasio Girardot, en un partido que dejó muchas dudas sobre las decisiones técnicas del entonces entrenador, David González.
Uno de los más críticos sobre ese planteamiento ha sido el capitán y referente del equipo, Julián Alveiro Quiñones, quien recientemente habló sin tapujos sobre lo ocurrido en la final. En una entrevista concedida a los periodistas Iván Lozano y Sergio Cepeda, el experimentado defensor señaló directamente al cuerpo técnico por haber improvisado en el momento más importante del semestre. “Con respeto al profe, creo que se equivocó en el planteamiento. Uno no puede cambiar el libreto en una final, y menos frente a Nacional”, afirmó.
Quiñones se refirió específicamente a la decisión de ubicar a Jhon Quiñones como lateral izquierdo, pese a tener en el banco a un jugador natural en esa posición como Jeison Angulo. Por ese costado llegaron los dos goles del rival, anotados por Andrés Román y Alfredo Morelos, lo que sepultó las aspiraciones del ‘Vinotinto y Oro’ de conseguir su cuarta estrella en la máxima categoría.
El zaguero también enfatizó en que el equipo se sintió desubicado durante el primer tiempo, al notar que la formación no era familiar y no había sido trabajada previamente. “Nunca usamos ese esquema durante su estancia en el club. No puedes ensayar en una final. Es una falta de preparación para un juego de tanta magnitud”, expresó con frustración el defensor tumaqueño, quien ha disputado más de 400 partidos con la institución.
Durante el segundo tiempo, el equipo ajustó su postura táctica y logró equilibrar el trámite del partido, incluso generando una opción clara con un penalti que pudo haberle dado vida al compromiso. Sin embargo, la falta de contundencia y el desbalance inicial ya habían inclinado la balanza a favor del conjunto antioqueño.
Para Quiñones, esa final no solo fue una oportunidad desperdiciada, sino un recordatorio de la importancia de la coherencia táctica en el fútbol de élite. “Uno aprende de los errores, pero hay derrotas que pesan más, y esta es una de ellas. Dolió mucho por el grupo, por la hinchada, por lo que habíamos construido”, dijo con visible tristeza.
Sus declaraciones tomaron fuerza al coincidir con la eliminación reciente de Millonarios, actual club de David González, que también vivió un fracaso rotundo al perder en casa contra Santa Fe, quedando fuera de la disputa por el título en el primer semestre de 2025. “Las cosas hay que decirlas, no es por herir, sino para que se aprenda”, concluyó el defensor.
Con 35 años y cuatro títulos en su palmarés, Julián Quiñones continúa siendo el líder indiscutido del Tolima, y su voz refleja el sentir de un vestuario que aún guarda la espina de lo que pudo ser una noche de gloria y terminó siendo una de las páginas más dolorosas en la historia reciente del club.




