El director de la Comisión de la Verdad, Francisco de Roux, le entregó una serie recomendaciones al presidente Gustavo Petro para el fortalecimiento de la paz durante su gobierno. Los consejos se formularon tras el análisis final del extenso documento que tienen el objetivo de alcanzar lo que denomina “la paz grande”, en el escrito le plasmaron las siguientes ideas:
- Muchos gobiernos crecieron, al principio, con las expectativas de la paz. Quizás las acrecentaron en demasía y terminaron en medio de la sangre. Este no puede ser el caso ahora.
- Hay posibilidad de una paz grande porque la aproximación a la verdad no puede ser considerada como un espacio de venganza, como si fuese una extensión de las mismas armas vueltas palabras, ideas, concepciones, interpretaciones, por ello no puede conseguirse, si quieren justicia sin reconciliación.
- Pasar a una era de paz en la historia de Colombia, no busca, simplemente cerrar unos conflictos para que empiecen unos nuevos conflictos armados, sino que lucha, para que desaparezca el uso de las armas como el instrumento que desdice de las posibilidades del acuerdo, como el instrumento de la venganza, como el instrumento del mismo conflicto
- Las sociedades siempre tendrán conflictos porque esa es la esencia del ser humano, como la diversidad, la diferencia. Pero el conflicto no puede ser sinónimo de la muerte, tiene que ser sinónimo, incluso, de la vida. Es una forma con la que la humanidad ha podido ascender. El conflicto dialogado es lo que permite que la humanidad crezca
- El siguiente paso en el conflicto armado que ha sufrido Colombia es el perdón, pero este depende exclusivamente de las víctimas y necesita que las generaciones de 200 años de soledad tengan una segunda oportunidad sobre la tierra.
Luego de esos mensajes, el presidente electo se comprometió a trabajar fuertemente por la paz y a respetar los acuerdos hechos para poder asegurar que no se volverá a repetir un conflicto, como el que duro más de sesenta años y acabo la vida de millones de seres humanos.
