La Selección de Guatemala dio un golpe de autoridad al vencer 0-1 a El Salvador como visitante en el Estadio Cuscatlán, en un partido correspondiente a la ronda final de las Eliminatorias rumbo al Mundial. El único tanto del compromiso fue obra de Óscar Santis al minuto 45, en una jugada que marcó la diferencia en un encuentro parejo y disputado.
A pesar de que Guatemala tuvo menos la pelota durante el partido, con solo un 41% de posesión, logró ser más efectiva que su rival. Con apenas 4 remates totales y 2 al arco, la eficiencia fue clave para llevarse los tres puntos. El Salvador, por su parte, remató cinco veces, pero solo una vez logró inquietar realmente al portero guatemalteco.
Los chapines completaron 301 pases con una precisión del 76%, números más bajos en comparación con los 407 pases y el 81% de precisión de El Salvador. Sin embargo, la solidez defensiva, el orden táctico y la capacidad de aprovechar su momento hicieron la diferencia. El equipo supo resistir los embates salvadoreños sin cometer errores graves.
En el plano disciplinario, Guatemala recibió dos tarjetas amarillas y cometió 17 faltas, la misma cantidad que su rival, en un partido friccionado pero sin mayores incidentes. La concentración fue total, especialmente en los minutos finales, donde lograron mantener la mínima ventaja y evitar cualquier reacción del conjunto local.
Un dato llamativo fue que Guatemala no generó ni un solo tiro de esquina durante el partido. Aun así, la eficacia en la única ocasión clara que tuvo fue suficiente para sumar una victoria valiosa. Además, solo cayeron una vez en posición adelantada, lo que muestra una buena lectura del juego ofensivo.
Con este triunfo, Guatemala suma 6 puntos en el Grupo A y se mantiene firme en la pelea por un cupo a la siguiente fase. La victoria también significó dejar sin puntos a El Salvador en lo que va del certamen, posicionando a los chapines en un lugar estratégico de cara a los próximos compromisos.
La ilusión mundialista sigue viva para Guatemala, que ahora deberá seguir construyendo sobre esta base de esfuerzo, orden y contundencia. Aunque los números no muestren superioridad, el resultado refleja un equipo capaz de competir y sacar provecho de cada detalle.
