La violencia volvió a sacudir con fuerza al sector agrícola del suroccidente colombiano. En las últimas horas, cuatro trabajadores de un ingenio azucarero resultaron heridos tras un ataque armado que se registró en la zona rural del municipio de Jamundí, Valle del Cauca. El hecho ocurrió exactamente en la calle 9 con carrera 23 de la vereda Villa Colombia, un área que en los últimos meses ha sido escenario recurrente de hechos delictivos.
Uno de los lesionados fue identificado como Hernán Cifuentes, quien desempeñaba labores de vigilancia en la zona y recibió un impacto de bala que lo mantiene bajo pronóstico reservado en un centro asistencial. Los otros tres afectados también fueron trasladados a clínicas cercanas, mientras las autoridades intentan establecer con precisión cómo se desarrollaron los hechos y quiénes serían los responsables del ataque.
Según los primeros reportes, el tiroteo se habría originado durante un intento de robo, aunque no se descartan otras hipótesis, dada la complejidad del conflicto que atraviesan muchas zonas rurales del Valle, donde grupos armados y delincuencia común se disputan el control territorial.
Al lugar de los hechos llegaron unidades de la Policía Nacional y personal del CTI para atender la emergencia, recolectar pruebas y realizar las primeras entrevistas. Sin embargo, hasta el momento no se han producido capturas ni se tiene información clara sobre los autores del atentado.
El gremio de empresarios cañeros, visiblemente consternado, lanzó un fuerte llamado al Gobierno Nacional para que se implementen medidas de protección urgentes en las zonas rurales. “No solo está en riesgo la producción agrícola, también la vida de los trabajadores que día a día sostienen la economía del Valle”, declaró un vocero del sector.
Además, representantes sindicales expresaron su preocupación por la falta de presencia permanente de la fuerza pública en regiones clave para el agro. “Los campesinos, corteros y vigilantes están siendo blanco de la criminalidad sin que se vea una acción efectiva del Estado”, agregaron.
Este nuevo hecho de violencia se suma a una creciente lista de ataques armados registrados en el sur del departamento, lo que ha generado un clima de temor y zozobra entre los habitantes rurales. La población teme que la inseguridad afecte aún más la ya golpeada economía regional.
Finalmente, las autoridades anunciaron la apertura de una investigación formal y ofrecieron recompensas para quienes entreguen información que conduzca a la captura de los responsables. Mientras tanto, las comunidades rurales de Jamundí claman por paz, justicia y acciones contundentes frente a la violencia que los asfixia día a día.
