Una nueva situación de violencia sacude al sur del Cauca. La Gobernación del departamento rechazó de forma categórica el secuestro de varios contratistas que hacían parte de un proyecto clave de infraestructura, en un hecho ocurrido en zona rural donde operan grupos armados ilegales.
De acuerdo con las primeras informaciones, los profesionales se encontraban desarrollando labores técnicas cuando fueron interceptados y retenidos de manera ilegal por actores armados que operan en la región. Las autoridades han iniciado las gestiones para su pronta liberación.
“El secuestro es una violación flagrante de los derechos humanos y un atentado directo contra el desarrollo del territorio”, expresó la Gobernación mediante un comunicado oficial, en el que también hizo un llamado al Gobierno Nacional y a la fuerza pública para que se actúe con urgencia y se refuercen las medidas de protección a los equipos que trabajan en campo.
El proyecto en cuestión es considerado de alto impacto para varias comunidades rurales, ya que busca mejorar el acceso vial y la conectividad entre municipios históricamente marginados. La retención de estos trabajadores no solo pone en riesgo sus vidas, sino que también paraliza obras esenciales para la región.
Líderes sociales y organizaciones comunitarias se unieron al rechazo y advirtieron que estas acciones no solo atentan contra la vida, sino también contra la esperanza de miles de habitantes que ven en estas obras una oportunidad de cambio y desarrollo.
La Gobernación reiteró que no permitirá que el miedo ni la violencia obstaculicen la inversión social en los territorios. “Reafirmamos nuestro compromiso con las comunidades del sur del Cauca. No vamos a ceder ante quienes pretenden imponer la guerra sobre la vida”, concluye el comunicado.
