Malas noticias para Ghislaine Maxwell y quien podría pasar 60 años en la cárcel y luego que una corte de los Estados Unidos la hallara culpable de los delitos de tráfico sexual con menores de edad.
El juicio dejó al descubierto los más escalofriantes testimonios que nunca antes se habían escuchado, donde las víctimas narraron como esta mujer las convencía para complacer los gustos sexuales del magnate, Jeffrey Epstein, al igual que otras grandes personalidades como Donald Trump, el Príncipe Andrés, y también otros políticos del mundo entre ellos algunos de Colombia.
Aún no se conoce la condena que deberá pagar esta sofisticada mujer y quien era una de las personalidades preferidas de la grandes revistas del mundo, pero que ahora su fama podría quedar reducida a una celda.
Este es el triunfo de más de 100 denunciantes y quienes que lucharon durante más de una década para que Epstein pague por lo que les hizo.
Con el juicio quedó al descubierto que Maxwell era la cómplice de Epstein, un depredador sexual, y cuyo modus operandi quedó reflejado en las cuatro víctimas.
Las cuatro víctimas que acudieron a testificar al juicio la describieron como una persona “muy sofisticada y muy elegante”, y una de ellas afirmó estar inicialmente “muy emocionada” por establecer una relación de amistad con Maxwell.
Carolyn, uno de los más duros testimonio, antes de tocarle sus pechos, una vez le dijo que “tenía un gran cuerpo para Epstein y sus amigos”. Recibió cientos de dólares por “masajear” a Epstein en cada uno de los más de 100 encuentros que realizó hasta que “se hizo demasiado mayor”.
Quién es Ghislaine Maxwell
Maxwell es la hija menor del fallecido magnate Robert Maxwell, el polémico propietario del diario londinense Daily Mirror y del tabloide neoyorquino Daily News, pero desarrolló su carrera laboral a la sombra del magnate Epstein, de quien fue mano derecha y pareja sentimental durante años.
A lo largo del tiempo, Maxwell trató con personalidades políticas como los expresidentes de Estados Unidos Bill Clinton y Donald Trump, con miembros de la familia real británica como el príncipe Andrés, empresarios como el fundador de Microsoft Bill Gates y otra miríada de actores y famosos, a muchos de los cuales su relación con Epstein les ha pasado o les está pasando factura.
Los miembros del jurado consideraron probado que entre 1994 y 2004, años en que vivió y trabajó para su examante, Maxwell hizo las veces de “madame”, consiguiendo, preparando y presentado mujeres y niñas para satisfacer los apetitos sexuales de Epstein, aunque su trabajo oficial fuera el de gestionar las casas y mansiones del millonario.
Entre las propiedad de la amante de Epstein está una casa en Palm Beach, en Florida, una mansión de cinco plantas en Nueva York, un rancho en Nuevo México, otro apartamento en París y una isla en Islas Vírgenes.
