Alberto Gamero, quien recientemente presentó su renuncia como director técnico de Millonarios, abrió su corazón al hablar sobre los difíciles momentos que vivió durante su tiempo en el club. El entrenador expresó sentirse profundamente triste debido a los constantes insultos de una parte de los hinchas, quienes no dudaron en manifestar su desaprobación hacia su trabajo.
En sus declaraciones, Gamero aseguró que siempre dio lo mejor de sí mismo para llevar al equipo a lo más alto, pero que la presión y la falta de apoyo en ciertos momentos afectaron emocionalmente su labor. A pesar de ello, agradeció a los seguidores que siempre lo apoyaron y recordó que su amor por el fútbol sigue intacto.
La renuncia de Gamero ha generado diversas reacciones, pero este testimonio añade una nueva perspectiva sobre los desafíos personales que enfrentó durante su paso por Millonarios.




