En los procedimientos evidenciaron heridas por arma de fuego a la altura de la cabeza con afectaciones en la región parietal y occipital. Al igual iniciaron todas las investigaciones para esclarecer lo acontecido.
Uno de sus amigos indicó que Jeffry era una persona que desde a temprana edad le gustaba practicar fútbol. “Gracias a su talento, varios equipos lo buscaban para que jugara en distintos torneos de la región y a nivel departamental. Su meta era irse al extranjero y consolidarse como un jugador profesional. Enviamos nuestro mensaje de solidaridad a su padre Einer Buitrón y a su madre Astrid Daza, que Dios les de fortaleza en este momento difícil”.
