El sábado, durante un operativo de control de la Policía de Tránsito, se inmovilizaron cinco vehículos por conducir bajo los efectos del alcohol, incluyendo uno propiedad de un funcionario. Lo polémico fue que la foto del vehículo y el reporte oficial desaparecieron misteriosamente de las redes sociales y los informes oficiales, lo que generó sospechas de manipulación de la información.
Aunque no se ha confirmado la identidad del funcionario, se le impuso un comparendo de $322.089 por conducir con licencia vencida. La falta de claridad en el manejo del caso ha generado desconfianza en la ciudadanía y abierto el debate sobre la equidad en la aplicación de las leyes de tránsito.
