Redacción Extra.
La comunidad del Barrio Arauquita se encuentra sumida en la indignación y la frustración, tras la denuncia de varios habitantes y dueños de vehículos que han quedado enterrados en una obra inconclusa que ha sufrido un notable abandono. Los habitantes del sector afirman que hace días no ven trabajadores en el lugar y, debido a las recientes lluvias, la situación se ha vuelto insostenible.
La obra, que prometía mejorar la infraestructura del barrio, se ha convertido en un foco de problemas para los residentes. “Nos dijeron que esto sería una mejora para todos, pero ahora es un caos”, comenta Cinthia Pérez, una vecina del sector quien ha visto cómo su entorno se transforma en un terreno intransitable. “Los carros están atrapados, no podemos salir con facilidad, y muchas familias tienen dificultades para realizar sus actividades diarias”.
Situación.
Las lluvias han exacerbado la situación, creando zanjas profundas que dificultan el paso incluso a pie. En un recorrido por el barrio, es evidente la frustración en el rostro de los lugareños. Algunos han optado por dejar sus vehículos en casa y utilizar medios alternativos de transporte, mientras que otros se preguntan si habrá alguna solución a este problema.
“Esto es una falta de respeto. Hicieron un gran anuncio sobre la obra, pero ahora nos dejan así, con calles destrozadas y vehículos enterrados”, asegura residente afectado. La paciencia de los vecinos se agota, y muchos han comenzado a organizarse para hacer escuchar su voz ante las autoridades locales. “Vamos a protestar, esto no puede seguir así. Necesitamos respuestas”, continúa Luis, mostrando su determinación por lograr que se tomen acciones inmediatas.
Desconfianza.
El hecho, que ha generado un ambiente de desconfianza hacia las promesas gubernamentales, lleva también consigo la preocupación de que esta situación pueda agravarse si no se actúa con rapidez. Con la llegada de nuevas lluvias, el temor a que más vehículos queden atrapados o que las condiciones de seguridad en el barrio se deterioren aumentan considerablemente. Al respecto, un representante de la alcaldía de Duitama comentó: “Estamos al tanto de la situación y se están evaluando las acciones a seguir. Sabemos que es un tema delicado y queremos resolverlo lo antes posible”. Sin embargo, esta declaración ha dejado a muchos vecinos escépticos, ya que las palabras han sido comunes en situaciones similares sin que se haya visto una solución concreta.
Mientras tanto, los residentes del Barrio Arauquita continúan lidiando con el descontento y la incertidumbre sobre el futuro de su comunidad. La esperanza persiste en que se realicen las reparaciones necesarias y que pronto puedan ver el final de una obra que promete cambios positivos, pero que hasta ahora solo ha traído inconvenientes.
Destacado
En este sentido, los ciudadanos han decidido no permanecer en silencio frente a su realidad.
