Al parecer, la propietaria del apartamento en el que los sujetos entraron a robar logró avisar a la comunidad que estaría siendo víctima de hurto y gracias a eso los ciudadanos lograron retener a los delincuentes.
Hecho
Según comentó la denunciante, todo ocurrió cuando está, habría llegado a su domicilio, el cual está ubicado en el barrio Montecarlo, al parecer la mujer cuando se acercó a su propiedad vio que la puerta estaba entreabierta y escucho ruidos a dentro, por lo que antes de ingresar pidió ayuda a sus vecinos.
“Cuando llegue vi una moto afuera y la puerta estaba un poquito abierta y medio me acerque y escuche mucho ruido, entonces mi reacción inmediata fue pedir ayuda porque yo vivo sola, entonces mis vecinos cogieron palos de escobas y elementos que tenían a su alcance y gracias a ellos fue que pudimos atrapar a dos de los ladrones”, relato Alejandra Pedreros, víctima.
Golpes
Al parecer varios vecinos ingresaron a la vivienda y en efecto encontraron al interior de la misma a tres jóvenes, quienes estaban esculcando toda la casa para sacar las pertenencias de valor, y cuando los hombres entraron al lugar comenzó la pelea y los golpes en contra de los delincuentes, pero en medio de la situación uno de los implicados salió de manera sagaz y logró escapar en una motocicleta.
“Nosotros entramos y vimos a los tipos y pues ellos se pusieron en alerta, entonces se comenzaron a defender, uno de los tres no se encaró y busco rápido la forma de salir y se logró escapar, entonces, aunque uno de los vecinos lo lograron a coger él alcanzó rápido a prender su moto e iba con una maleta llena de cosas y se logró escapar
Víctima
La dueña del apartamento aseguró que, pese al esfuerzo de los vecinos por evitar la huida del lugar, uno de los hombres se habría llevado pertenencias evaluadas a tal punto que la ciudadana aseguro que todo estaría valuado alrededor de 15.000.000 millones de pesos.
Captura
Enfurecidos los hombres golpearon brutalmente hasta hacerlos sangrar y posteriormente cuando los delincuentes estaban totalmente reducidos los amarraron con una cuerda a una reja y allí con patadas y puños los siguieron golpeando hasta que llegó la policía.
Una vez los uniformados llegaron al lugar pusieron a salvo a los delincuentes, pues estaban muy malheridos y posteriormente les leyeron sus derechos como personas capturadas.




