En la mañana de este miércoles, un grupo de asaltantes hizo presencia en el municipio de Ábrego, en la región del Catatumbo, con el propósito de robar una sucursal de Bancolombia. El plan de los delincuentes, que incluía adherir explosivos al subgerente de la entidad financiera, mediante un «cinturón bomba». Sin embargo, el asalto fue frustrado por el propio funcionario, que en un acto de valentía se despojó del peligroso elemento y logró huir.
Después del arriesgado escape, el sugerente logró poner en aviso de las autoridades la acción criminal.
Los delincuentes interceptaron al funcionario cuando se movilizaba hacia la población en un vehículo de marca Ford, modelo Fiesta, de placas MBY 655, que terminó finalmente hurtado por los criminales.
Las autoridades indagan si el plan de los delincuentes incluía abandonar un cilindro bomba en la mitad de la vía al municipio, dispositivo que fue hallado en horas de la mañana.
De acuerdo con el diario La Opinión, hasta el momento ningún grupo armado se ha atribuido el hecho criminal, pero en la zona hacen presencia disidentes de las Farc y elementos del ELN.
El caso recuerda uno de los crímenes más cruentos en la historia del país, registrado el 17 de mayo del 2000, cuando delincuentes comunes le pusieron un collar bomba a una campesina en zona rural de Chinquinquirá, Boyacá. El crimen inicialmente fue atribuido a las Farc, pero después se desvirtuó la autoría de la guerrilla.
