Francia, oficialmente conocida como la República Francesa, es un país transcontinental que se extiende por Europa Occidental y diversos territorios de ultramar en América y en los océanos Atlántico, Pacífico e Índico. Este país es uno de los veintisiete Estados miembros de la Unión Europea y se caracteriza por su modelo de gobierno semipresidencialista unitario, con su capital en París, la mayor ciudad y principal centro cultural y comercial.

La Francia metropolitana se extiende desde el río Rin hasta el océano Atlántico, y desde el mar Mediterráneo hasta el canal de la Mancha y el mar del Norte. Además, incluye territorios de ultramar como la Guayana Francesa en América del Sur, las Antillas francesas, San Pedro y Miquelón, y varias islas en Oceanía y el océano Índico. Esto le otorga a Francia la mayor zona económica exclusiva del mundo, con dieciocho regiones, cinco de las cuales están en ultramar, abarcando una superficie total de 643,801 km² y con una población de más de 68 millones de personas.
El país cuenta con una rica historia que se remonta a la Edad del Paleolítico, con la presencia de tribus celtas conocidas como galos que fueron colonizadas por Roma en el 51 a.C., formando una cultura galorromana que sentó las bases del idioma francés. En la Edad Media, Francia se consolidó como un reino feudal poderoso, especialmente bajo el reinado de Felipe II, quien reforzó el poder real y expandió significativamente el territorio de la corona. Durante este período, Francia emergió como el estado más poderoso de Europa.
A lo largo de los siglos, Francia ha sido testigo de importantes eventos históricos como la Guerra de los Cien Años, la Revolución Francesa de 1789, y el establecimiento del Primer Imperio francés bajo Napoleón Bonaparte. Estas etapas marcaron profundamente la historia europea y mundial.




