Con una agenda marcada por el compromiso y la esperanza, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) Regional Nariño se unió a la conmemoración del Día Internacional de la Niña, liderando una serie de acciones orientadas a prevenir los matrimonios infantiles, las uniones tempranas y toda forma de violencia que afecte el desarrollo integral de las niñas del departamento.
Bajo la orientación de la directora general del ICBF, Astrid Cáceres, la entidad impulsó una jornada nacional en la que Nariño tuvo un papel destacado, visibilizando los desafíos que enfrentan las niñas en territorios rurales, comunidades étnicas y zonas afectadas por el conflicto armado.
“Las niñas de Nariño merecen crecer libres, seguras y felices. No se casan, no se venden, no se intercambian; ellas estudian, sueñan y lideran”, expresó Cáceres en un mensaje transmitido desde Jamundí, Valle del Cauca, donde encabezó el acto central de la campaña.
Cifras que preocupan
De acuerdo con datos del Sistema de Información Misional (SIM), durante la vigencia 2025 se reportaron 1.016 denuncias por presuntas vulneraciones de derechos en niñas del departamento de Nariño.
Las principales afectaciones están relacionadas con violencia física, psicológica y sexual, conflictos por alimentos y problemas de convivencia familiar y escolar.
Sin embargo, el dato más alarmante es que el 53,4 % de los casos (543 denuncias) corresponde a uniones tempranas y matrimonios infantiles, un fenómeno que persiste en zonas rurales y comunidades donde las condiciones económicas y sociales limitan las oportunidades de las menores.
Estas cifras reflejan la urgencia de fortalecer la educación, el acompañamiento familiar y los entornos protectores, para garantizar que las niñas nariñenses puedan decidir sobre su futuro y ejercer plenamente sus derechos.
Conflicto armado
El informe también reveló que 1,67 % de los casos de vulneración están vinculados al conflicto armado, con reportes de orfandad, amenazas y riesgo de reclutamiento. Aunque este porcentaje es menor, representa una realidad dolorosa que requiere atención inmediata y una articulación efectiva entre las instituciones del Estado y las comunidades locales.
“En Nariño seguimos enfrentando realidades complejas, pero estamos firmes en la tarea de proteger a nuestras niñas. Cada acción, cada intervención y cada familia acompañada son pasos hacia un departamento más justo y seguro”, manifestó una vocera del ICBF Regional Nariño.
Llamado la sociedad
Bienestar Familiar reiteró su compromiso con la garantía y restitución de los derechos de las niñas en el territorio, fortaleciendo programas de prevención, empoderamiento y acompañamiento psicosocial. Además, hizo un llamado a las familias, instituciones educativas y autoridades locales a trabajar unidos por la igualdad, la seguridad y la dignidad de las niñas nariñenses. El ICBF recordó que proteger a las niñas no es solo una responsabilidad institucional, sino una tarea de todos. “Cada niña que logra estudiar, jugar y crecer sin miedo es una victoria para Nariño”, destacó la entidad en su mensaje final.




