Durante la pandemia, muchos emprendedores buscaron formas de reinventarse, pero pocos lo hicieron con tanta creatividad y convicción como Forbici By Daniela Castillo. Lo que empezó como un proyecto modesto—una sola blusa diseñada en medio de la cuarentena—se convirtió en una marca de moda que hoy exporta y se diferencia por un estilo propio, telas elegidas y una filosofía de vestuario cómodo que acompaña el movimiento del cuerpo.
Orígenes humildes y visión clara
La idea surgió en un momento de incertidumbre. Muchas marcas cerraban, la cadena de abastecimiento estaba interrumpida y los consumidores se volvían más exigentes. Daniela Castillo aprovechó ese momento para diseñar prendas con telas ligeras, siluetas que permitieran libertad de movimiento, y un sello auténtico: no vestir para impresionar, sino para sentirse libre. Eso ha sido clave en la identidad de Forbici.
Diferenciación: materiales, siluetas y mensaje
Lo que distingue a Forbici no solo es el diseño, sino su manera de entender la moda como compañera del cuerpo. Las telas fluyen, respiran. Las siluetas están pensadas para acompañar y no constreñir. Más de una vez han recibido mensajes de personas que dicen: “esa persona lleva Forbici”, señal de que el estilo se reconoce.
Además, el emprendimiento ha trabajado desde el inicio con criterios de calidad y una producción consciente, pensando en exportar tanto como en atender al mercado local. Esa orientación ha implicado aprender sobre logística, normatividad para exportar, acompañamiento comercial, control de costos y valor agregado.
Retos superados y lecciones aprendidas
Forbici ha sorteado dificultades propias de comenzar en tiempos inciertos: restricciones sanitarias, acceso limitado a proveedores, altas fluctuaciones en los precios de insumos textiles, y la necesidad de adaptarse al comercio digital. Pero cada barrera ha reforzado su estrategia: creer en lo propio, apostar por calidad, y persistir.
Daniela Castillo afirma que una de sus mayores enseñanzas es que “todos podemos, que hay que creerse el cuento para poder surgir”. Esa convicción la ha impulsado no solo a mantenerse, sino a mirar hacia adelante: crecer en volúmenes de exportación y ampliar mercados externos.
