La Fiscalía General de la Nación desarticuló una estructura criminal dedicada al contrabando y comercio ilícito de cigarrillos provenientes de China, los cuales ingresaban al país evadiendo los controles aduaneros y tributarios. Parte de esta mercancía era enviada a Ecuador, donde era vendida en dólares.
El operativo, liderado por la Dirección Especializada contra los Delitos Fiscales, reveló que la organización tenía su centro de operaciones en el municipio de Ipiales, aprovechando su ubicación estratégica en la frontera sur de Colombia. Desde allí, los integrantes coordinaban la llegada, almacenamiento y distribución de grandes cantidades de cigarrillos que ingresaban por los puertos de Cartagena y Buenaventura.
Las autoridades detallaron que los contrabandistas contaban con inmuebles usados como bodegas para acopiar la mercancía antes de ser enviada a distintos puntos del país y al vecino Ecuador. Cada miembro de la red tenía funciones definidas: algunos fijaban precios y rutas, otros se encargaban del transporte y la comercialización, mientras un grupo vigilaba los desplazamientos para alertar sobre la presencia de la Policía o la DIAN.
El operativo permitió incautar 160.000 cajetillas de cigarrillos en tres diligencias realizadas los días 20, 23 y 24 de septiembre. Los decomisos fueron posibles gracias a un seguimiento constante de los vehículos que transportaban la mercancía ilegal.
La Fiscalía informó que los capturados fueron presentados ante un juez de control de garantías y enfrentarán cargos por contrabando agravado y concierto para delinquir, delitos que podrían acarrear penas de prisión superiores a los diez años.
Las autoridades reiteraron su compromiso en la lucha contra el contrabando, un delito que afecta gravemente la economía nacional y la salud pública, al permitir la circulación de productos sin control sanitario ni tributario.




