La Fiscalía General de la Nación imputó cargos al exgobernador de La Guajira, Juan Francisco “Kiko” Gómez, por presuntas irregularidades en la contratación de servicios de salud durante su administración. Según el ente acusador, se habrían desviado más de $4.500 millones mediante contratos ficticios firmados entre 2011 y 2013.
Los investigadores establecieron que los recursos públicos destinados a atención médica fueron redireccionados a empresas de papel, en una red de corrupción que también involucra a varios exfuncionarios de la Secretaría de Salud departamental. Gómez ya cumple una condena por homicidio y otros delitos.
