El actor vallecaucano Fernando ‘Flaco’ Solórzano fue el último en salir de La Casa de los Famosos (LCDLF), el popular reality show que está a punto de llegar a su fin. A pesar de su salida reciente, Solórzano dejó una huella en el público por su carisma y su perfil tranquilo, alejándose de los conflictos y las polémicas que marcaron la convivencia en la casa. Con su salida, solo quedan 7 concursantes en competencia por el premio final.
En una entrevista , el actor de 61 años se sinceró sobre su experiencia en el programa, revelando que, aunque la participación fue un reto personal, sufrió emocionalmente durante los 113 días que pasó en la casa. “Yo sufrí todo el tiempo. Yo sufrí 113 días y aguanté 113 días. Para mí no fue chévere”, expresó con total sinceridad.
A pesar de la carga emocional que le supuso estar en el programa, Solórzano destacó que fue una experiencia valiosa y que, aunque estuvo cerca de renunciar en algunos momentos, se siente satisfecho con lo que logró. «Fue un viaje tremendo. Fue un trip. Que uno casi que lo debería hacer en la vida una vez», comentó.
El actor agregó que, tras su salida, se tomará un merecido descanso antes de regresar a sus proyectos en teatro o televisión. “Fue interesante. Fue una experiencia inolvidable. Me siento muy satisfecho de haber durado 113 días, era lo que yo sentía que debía durar. Hubo un momento en que ya estaba como rayado, ya dije ‘sí, mucha final y falta poco, pero estoy sin aire’», confesó, refiriéndose a lo extenuante que fue para él la experiencia.
Durante su tiempo en LCDLF, Solórzano mantuvo el apoyo constante de sus seguidores, quienes apreciaron su postura calmada y su capacidad para mantenerse al margen de las controversias. Ahora, con su salida, los fanáticos del actor esperan conocer cuáles serán sus próximos pasos en el mundo del entretenimiento.
La Casa de los Famosos está a solo unos días de su final, y Solórzano, aunque no ganó el concurso, se lleva consigo la satisfacción de haber superado un desafío personal que, sin duda, marcará su carrera.




