A pesar de la intención de ofrecer un espacio para la visibilidad y el crecimiento de nuevos negocios, las ferias han sido catalogadas como un «fiasco» debido a la escasa participación de visitantes. Los emprendedores, muchos de ellos con productos innovadores y creativos, han expresado su frustración por la falta de interés y la baja asistencia, lo que ha afectado las ventas y el impacto que esperaban lograr.
Expertos en el tema señalan que las razones detrás de esta situación podrían incluir una saturación de eventos similares en la ciudad, dificultades económicas que afectan el poder adquisitivo de los asistentes y, en algunos casos, la falta de promoción adecuada de los mismos. Además, algunos emprendedores comentan que la competencia con otras actividades de fin de año también ha restado atención a estas ferias.
A pesar de los esfuerzos por reactivar la economía local y apoyar a los nuevos empresarios, los organizadores de estas ferias deberán replantear sus estrategias para futuras ediciones, buscando atraer mayor público y mejorar la experiencia tanto para los expositores como para los asistentes.




