La familia Ortega Manzano, residente en Cali, atraviesa un difícil y angustioso
momento tras el fallecimiento de uno de sus integrantes, Pablo Emilio Ortega
Manzano. Las circunstancias en torno a su muerte, ocurrida mientras estaba
recluido en una estación de policía del barrio El Guabal, permanecen rodeadas de
interrogantes y generan una profunda indignación.
Caso
De acuerdo con las declaraciones de su hermana, Victoria Eugenia Ortega,
brindadas al diario Extra, la situación comenzó cuando Pablo Emilio fue detenido
debido a ciertos inconvenientes que tuvo. Durante su reclusión en la estación de
policía, surgieron hechos que han dejado a su familia en una búsqueda incansable
de respuestas. “Nosotros vivimos en el barrio San Judas. La patrulla de policía
número 8 llegó a la casa y preguntó si aquí vivía Pablo Emilio. Les dijimos que sí,
y ahí nos informaron que tenían una mala noticia: Pablo había fallecido. Nos
dijeron que se había caído en el baño, que lo llevaron a la clínica Sura, pero no
pudieron reanimarlo y se murió. No nos dieron más detalles de lo que pasó”, relató
doña Victoria, visiblemente afectada por lo ocurrido.
Interrogantes
Según Victoria, en una de las visitas que realizó a la estación de policía, notó que
su hermano presentaba lesiones en el rostro. “En la segunda visita lo encontré con
un ojo morado, lo tenía rojo. Le pregunté: ¿y qué te pasó? Y él me respondió que
un zapatazo que cayó desde arriba, porque allá son 60 muchachos en una celda.
Le dije que les dijera a los demás que tuvieran cuidado con los zapatos. Pero ese
ojo rojo parecía más bien como si le hubieran dado un puño”, afirmó. Esta
situación aumenta las dudas sobre los eventos que llevaron a su traslado al centro
asistencial y, finalmente, a su muerte.



