Cabe indicar que ‘Dani’ como le decían de manera cariñosa sus amigos, trabajó durante muchos años en un taller de monta llantas donde gracias a su profesión logró conocer muchas personas que llegaron a apreciarlo y estimarlo por su don de gente. “Él siempre era amable con la clientela; la gente lo buscaba mucho porque le ponía atención a lo que hacía. Además, se caracterizaba por su alegría y amabilidad. Enviamos un saludo de aliento a todos sus familiares, sabemos que estos momentos son difíciles de superar, son pruebas muy dolorosas las que Dios nos coloca, pero hay que saberlas afrontar”.
Su cuerpo fue velado en su lugar de residencia, posteriormente sus dolientes lo trasladaron hasta el municipio La Paila donde le dieron cristiana sepultura. “Una gran persona nos ha dejado y aunque ya no esté con nosotros, guardaremos en nuestros corazones su recuerdo. Nos consuela el saber que desde donde se encuentre nos puede ver y estará velando por nosotros”, amigos.




