La comunidad de Restrepo, está de luto tras el fallecimiento de una de sus ciudadanas más queridas y respetadas. Laura María Rojas de Céspedes, comerciante reconocida y vecina del barrio Centro, falleció a sus 84 años, dejando un vacío en el corazón de quienes la conocieron y compartieron con ella.
Legado
Doña Laura, como cariñosamente la llamaban en el pueblo, dedicó gran parte de su vida al comercio, ganándose el aprecio de sus clientes y vecinos por su espíritu servicial y amable. Su legado comercial será por muchos años un punto de referencia para la comunidad, pues ella, más allá de las transacciones comerciales, tejían lazo de amistad y compañerismo.
Labor
Aquellos que la conocieron recuerdan su sonrisa siempre presente y la calidez con la que atendía a todos, sin importar si eran clientes habituales o alguien que pasaba por primera vez. Era una mujer trabajadora, dedicada a su familia, y con un gran sentido de responsabilidad por su labor.
Hoy, sus seres queridos lamentan su partida, mientras la comunidad en general acompaña su dolor. Las muestras de afecto y apoyo han sido constantes desde que se conoció la noticia de su fallecimiento, lo que refleja el impacto que Doña Laura tuvo en la vida de muchos.
A lo largo de los años, Laura María Rojas de Céspedes se ganó un lugar especial en la historia de Restrepo, no solo como comerciante, sino como un pilar de su comunidad. Su legado perdurará en la memoria de quienes tuvieron la fortuna de conocerla, y su ausencia será profundamente sentida en cada rincón del barrio Centro, donde vivió gran parte de su vida.




