Los habitantes del municipio de Puerto Tejada, población ubicada al Norte del departamento del Cauca lamentaron el sensible fallecimiento de la señora Patricia Aponzá de 53 años de edad. Según sus amigos del barrio La Esperanza, la distinguida ciudadana venía padeciendo algunos quebrantos en salud, los cuales no pudo superar.
Quien era
El deceso de la señora Patricia causó dolor ya era la madre del destacado deportista caucano Jean Carlos Mina Aponzá quien hace poco le había regalado una enorme alegría al deporte colombiano colgándose la medalla de bronce haciendo una espectacular carrera en los 100 metros clase T13 y mejorando además su marca personal con un tiempo de 10.64. Mina le había dedicado la medalla de bronce a su mamá, en declaraciones que dio luego de ganar la prueba.
Lamentable
“Al parecer doña Paty como le decíamos de manera cariñosa, no quería despedirse de este mundo sin ver triunfar a su hijo, el ‘Jaguar’ como es conocido en todo Puerto Tejada. Mientras acá todos celebrábamos la conquista de la medalla, el corazón de su progenitora dejaba de latir. Estos son los contrastes de la vida, de un momento de euforia, pasas a momentos de dolor y tristeza”.
Su deceso
La progenitora del deportista llevaba varios días internada en una clínica. Posteriormente los médicos la enviaron a su casa porque ya habían hecho todo lo posible por lograr estabilizarla. Infortunadamente, el día de ayer en horas de la noche al ver la actuación de su hijo, su estado de salud se complicó y se produjo su deceso.
Mensaje
Conocida la noticia, el medallista Portejadeño escribió: “Le doy las gracias a Dios por haber escogido a tan bella mujer para que fuera mi madre. Estoy eternamente agradecido contigo gracias por todo y en especial por hacernos fuertes, te amaré por siempre, vuela alto. Sé que Dios te tiene en el reino de los cielos”. El cuerpo fue velado en el barrio La Esperanza donde asistieron varios compañeros y demás dolientes. Posteriormente se ofició una misa en la iglesia Inmaculada Concepción. Posteriormente, sus despojos mortales, fueron conducidos hasta el Campo Santo donde le dieron su último adiós.




