Las autoridades confirmaron el fallecimiento de Valentina Restrepo, una joven de 15 años que sufrió un accidente grave el pasado 4 de julio mientras practicaba gravity bike en la autopista Medellín–Bogotá, a la altura del kilómetro 10+320, en el sector de Cabuyal, Copacabana. Este trágico desenlace ha conmocionado a la comunidad y reavivado el debate sobre la seguridad de este deporte extremo.

Según versiones preliminares, Valentina y otro joven descendían a alta velocidad por esta vía, altamente transitada, cuando perdieron el control y se estrellaron contra un poste de energía. Como resultado, Valentina sufrió una severa lesión en la cabeza, mientras que su acompañante resultó con múltiples heridas en diferentes partes del cuerpo. A pesar de los esfuerzos médicos, Valentina falleció días después debido a la gravedad de sus heridas.
El gravity bike, una práctica que consiste en descender en bicicleta a gran velocidad en pendientes, ha cobrado varias víctimas en la región. Las bicicletas utilizadas para esta actividad suelen ser modificadas para ganar velocidad, y la mayoría de los jóvenes que las practican lo hacen sin el equipo de protección adecuado, exponiéndose a accidentes que pueden resultar fatales.
Ante este nuevo accidente mortal, las autoridades locales han instado a la comunidad, especialmente a los jóvenes, a evitar la práctica de gravity bike en vías públicas y a respetar las normas de tránsito. «La autopista no es una pista de carreras», subrayaron voceros de la policía de tránsito, quienes recalcaron la importancia de cuidar la vida y evitar prácticas riesgosas en las vías.
Este trágico incidente ha puesto en alerta a las autoridades y familias en Antioquia, que ven con preocupación cómo cada vez más jóvenes se sienten atraídos por este tipo de deportes sin tener en cuenta los riesgos que implican.




