María Victoria descansaba, cuando le informaron de la conflagración.
El fatídico suceso tuvo lugar en la madrugada del lunes 6 de mayo, alrededor de las 3:00 de la mañana, cuando la señora María Victoria descansaba. Fue alertada por un vecino del segundo piso, quien le comunicó que el terreno donde se erige su fábrica estaba siendo consumido por el fuego. En medio del pánico, la propietaria y su vecino actuaron con celeridad, contactando de inmediato a los bomberos, quienes, con prontitud, acudieron al lugar y lograron contener el incendio. Aunque la intervención fue rápida, las pérdidas materiales fueron cuantiosas, especialmente con la maquinaria reducida a cenizas.
Afortunadamente, el momento del siniestro no coincidió con la presencia de materia prima en la fábrica, como el millo, lo que habría exacerbado la magnitud del desastre. No obstante, las dudas y la incertidumbre persisten en cuanto a las causas que desencadenaron el incendio. Las autoridades aún no han arrojado luz sobre el origen del fuego, aunque no descartan la posibilidad de una intervención criminal.
Las hipótesis sobre la naturaleza del incendio abundan, pero ninguna ha sido confirmada por las autoridades hasta el momento. La sombra de la sospecha se cierne sobre la posibilidad de manos criminales detrás de este desafortunado acontecimiento. Sin embargo, es necesario esperar los resultados de las investigaciones para obtener una conclusión clara sobre lo ocurrido en la ranchita de la calle 44 con 8.
