Una estructura criminal dedicada a la extracción y venta ilegal de agua del río Hacha fue desmantelada por las autoridades en Florencia, Caquetá. En la operación, realizada en coordinación entre la Policía Nacional, la Alcaldía de Florencia y la Fiscalía General de la Nación, fueron capturadas 11 personas y se incautaron equipos valuados en más de 19 millones de pesos.
La intervención se llevó a cabo en el barrio La Floresta, en la carrera 7 con calle 5 del centro poblado de Puajil, donde operaba la red que venía afectando gravemente el suministro de agua y generando un impacto ambiental sobre la cuenca del río Hacha.
Durante el operativo, la Policía del Agua decomisó seis electrobombas, valoradas en $9.000.000, y siete rollos de manguera de 25 metros, con un avalúo total de $10.500.000. Los equipos eran utilizados para desviar grandes volúmenes de agua de forma clandestina, afectando a miles de habitantes.
Implicados y delitos
Los 11 capturados fueron identificados preliminarmente por los alias de ‘El Capi’, ‘Muelas’, ‘Care Percha’, ‘El Chato’, ‘Ñeco’, ‘Tazmania’, ‘El Flaco’, ‘Chicharrón’, ‘Guadaña’, ‘Pitufo’ y ‘Gafas’. Enfrentarán cargos por aprovechamiento ilícito de recursos naturales renovables y contaminación ambiental, tipificados en el Código Penal Colombiano.
Las investigaciones señalan que los detenidos conformaban una red organizada que operaba en distintos sectores del río Hacha, donde instalaban conexiones ilegales para extraer y comercializar el recurso sin control.
Autoridades se pronuncian
El brigadier general José James Roa Castañeda, director de Carabineros y Protección Ambiental, señaló la importancia de esta acción en la defensa de los recursos naturales:
“El agua es un derecho, no un negocio ilegal. Con esta intervención, hemos dado un paso firme en su protección, cerrando el paso a quienes contaminan y explotan de manera indebida nuestras fuentes hídricas”.
Por su parte, la Policía Nacional reiteró su llamado a la ciudadanía para denunciar cualquier actividad sospechosa relacionada con la extracción ilegal de agua. Según el ente, este golpe hace parte de una estrategia integral para frenar el tráfico y explotación de los recursos naturales del país.




