La Fiscalía demostró que el hombre, a pesar de estar recluido en la cárcel El Barne en Cómbita (Boyacá), realizaba llamadas extorsivas a diferentes personas, con la excusa de requerir un servicio determinado.
En uno de los casos documentados por la Fiscalía ocurrido el 2 de junio de 2014. En ente investigador demostró que el procesado contrató una compañía de servicios funerarios con sede en Tierralta (Córdoba) para el supuesto traslado de un cuerpo desde la vereda El Salmon en Tuluá (Valle del Cauca).
Posteriormente, haciéndose pasar por integrante de un grupo armado ilegal llamó a la representante legal de la funeraria para la que trabajaba el conductor, de quien dijo había sido retenido.
Por la supuesta liberación exigió el pago de 6 millones de pesos, so pena de asesinarlo.
La Fiscalía seccional Boyacá a cargo de Lizeth Franco, demostró que llamadas similares eran realizadas desde el centro carcelario por parte Mercado Pacheco.
