El intento del presidente Yoon Suk Yeol de transferir el poder al líder de su partido constituye otra acción ilegal e inconstitucional, un segundo golpe de Estado, alertan los oponentes.
El lunes (09.12.2024), la oposición de Corea del Sur imputó al partido en el poder de orquestar un «segundo golpe» de Estado al mantenerse en el poder y rechazar un juicio político contra el presidente Yoon Suk Yeol por declarar la ley de la masacre.
El presidente y varios altos puestos están bajo investigación por insurrección, sin embargo, el esfuerzo por destituir a Yoon no prosperó el sábado después del boicot del partido en el poder, que sostiene que el líder, sumamente impopular, ha decidido entregar el poder al primer ministro y al líder del partido.
«No importa cómo intenten defenderlo, la esencia se mantiene inalterable: es un acto ilegal e inconstitucional, una segunda revuelta y un segundo golpe de Estado», expresó Park Chan-dae, líder del partido democrático, al solicitar al partido gubernamental «poner fin a esto de inmediato».
De acuerdo con la Constitución de Corea del Sur, el presidente continúa siendo el líder del gobierno y el comandante supremo del ejército, a no ser que esté enfermo, dimita o dimita.
«Una flagrante violación constitucional sin base legal»
En ese caso, la autoridad se transferiría al primer ministro de manera provisional, hasta que se pudieran realizar elecciones.
Sostener que Yoon puede mantenerse en el puesto, sin embargo, que ha transferido sus poderes al primer ministro y al líder del Partido del Poder Popular -que no es una posición electoral- constituye «una violación constitucional sin fundamento legal», afirmó Park.
«Su postura de elevarse sobre la Constitución representa la del rebelde Yoon Suk Yeol», agregó.
Los investigadores ya han arrestado al ex ministro de Defensa, inspeccionado sus oficinas, prohibido su desplazamiento a diversos puestos de alto nivel y el lunes convocaron al general designado como comandante de la ley marcial para interrogarle.
La policía anunció el lunes que Yoon podría ser llamado para ser interrogado, añadiendo que están «considerando» la opción de impedirle viajar.
