La presidenta de la Fundación Condisco, Tania Retamar, lideró un encuentro emotivo y revelador en la Comuna 10 de Neiva, donde se puso en primer plano la voz y las historias de mujeres dedicadas a cuidar personas con discapacidad.
En medio de un ambiente cargado de empatía y solidaridad, Retamar destacó la urgencia de reconocer y dignificar la labor de las cuidadoras, quienes enfrentan no solo responsabilidades físicas y emocionales, sino también barreras sociales y económicas. “El rol de la cuidadora es esencial y muchas veces invisible. Queremos que la sociedad y las instituciones comprendan que detrás de cada persona con discapacidad hay una mujer que entrega su vida, sus fuerzas y su amor”, afirmó.
Red de apoyo
El evento contó con la participación de la Red de Cuidadoras de la Comuna 10, espacio que se ha consolidado como un proceso significativo en el municipio, el departamento e incluso a nivel nacional. Las asistentes compartieron experiencias sobre sus retos cotidianos, las carencias de apoyo institucional y la necesidad de contar con programas de salud mental, capacitación y alivios económicos.
Llamado
Tania Retamar hizo un llamado a la administración municipal y departamental para fortalecer las políticas públicas dirigidas a esta población. “Cuidar no puede seguir siendo sinónimo de sacrificio absoluto. Es hora de garantizarles derechos, tiempo de descanso y oportunidades de desarrollo personal y laboral”, enfatizó.
La jornada culminó con la esperanza de consolidar alianzas que permitan visibilizar y transformar la realidad de miles de mujeres cuidadoras que, silenciosamente, sostienen familias y comunidades enteras en Neiva y el Huila.
