Un reciente estudio científico ha encendido las alarmas en la comunidad médica al revelar que ciertas infecciones respiratorias, entre ellas el COVID-19, podrían jugar un papel en la reactivación de células cancerosas que permanecían inactivas en el organismo.
De acuerdo con los investigadores, virus como el SARS-CoV-2 pueden desencadenar procesos inflamatorios en el cuerpo que alteran el entorno celular, generando condiciones propicias para que células tumorales residuales es decir, aquellas que sobrevivieron a un tratamiento y permanecían en estado latente vuelvan a activarse y den lugar a una recaída de la enfermedad.
El estudio, publicado en una revista científica especializada, analizó modelos en laboratorio y datos clínicos de pacientes que habían superado distintos tipos de cáncer. Los resultados muestran que la inflamación provocada por infecciones respiratorias puede alterar el equilibrio inmunológico y metabólico, reactivando células malignas previamente controladas.
Aunque se trata de una investigación en etapa temprana, los hallazgos abren una nueva línea de análisis sobre el impacto a largo plazo del COVID-19 y otras infecciones virales en pacientes con antecedentes oncológicos. Los expertos insisten en la necesidad de mayor vigilancia médica en este grupo poblacional, especialmente tras episodios de enfermedad respiratoria aguda.




