Mantenerse activo es uno de los pilares fundamentales para gozar de buena salud física y mental. Sin embargo, no siempre queda claro cuánto tiempo es necesario dedicar al ejercicio para obtener beneficios reales.
De acuerdo con las recomendaciones más aceptadas en el campo de la salud y el deporte, los adultos deberían realizar al menos 150 minutos de actividad física moderada a la semana. Esto equivale a 30 minutos diarios durante cinco días, con actividades como caminar a paso rápido, montar bicicleta o nadar de manera ligera.
Para quienes prefieren entrenamientos más intensos, la sugerencia es 75 minutos semanales de actividad vigorosa, como correr, hacer entrenamientos funcionales de alta intensidad o practicar deportes que demanden mayor esfuerzo cardiovascular.
Además, los especialistas destacan la importancia de dos sesiones de fortalecimiento muscular por semana, que incluyan ejercicios con pesas, bandas elásticas o el propio peso corporal, con el fin de proteger huesos, articulaciones y mejorar la resistencia.
Cumplir con estas metas no solo contribuye a controlar el peso, sino que también reduce el riesgo de enfermedades crónicas, mejora el estado de ánimo y eleva los niveles de energía. La clave, señalan, está en la constancia y en encontrar una rutina que sea agradable y sostenible en el tiempo.




