Tras una cumbre de alto nivel en Singapur, Estados Unidos y China anunciaron que reanudarán los canales de comunicación militar suspendidos desde 2022, cuando se incrementaron las tensiones por Taiwán. El secretario de Defensa de EE.UU. y su homólogo chino coincidieron en la necesidad de evitar malentendidos que puedan escalar a un conflicto mayor en la región del Indo-Pacífico.
Este acercamiento se considera un avance diplomático crucial tras años de fricciones. Aunque persisten desacuerdos sobre el Mar de China Meridional y las maniobras militares en la región, ambas partes acordaron establecer una línea directa de emergencia y retomar los ejercicios de consulta para fortalecer la confianza mutua y reducir los riesgos de confrontaciones accidentales.
