Imagen: Michael Leach and Meriel Lland/Avalon.red/IMAGO
El pequeño animal hallado en Chiloé por Charles Darwin continúa en peligro, aunque en realidad, afirman especialistas, son dos especies que buscan resguardo.
Chile ha iniciado un nuevo esfuerzo para proteger a la ranita de Darwin, un pequeño anfibio con piel parecida a una hoja, cuyos machos mantienen renacuajos en bolsas de orina.
El proyecto, promovido por el comité de cambio climático y sostenibilidad del gobierno de Chile, tiene como objetivo salvaguardar los hábitats y zonas reproductivas de este pequeño animal, también denominado en Chile como «sapito vaquero», incluso cooperando con dueños de terrenos privados.
La meta es identificar nuevas comunidades de ranita de Darwin, si se puede, y incrementar significativamente la zona ocupada por las poblaciones presentes.
No es una especie, sino dos
La rana, inicialmente considerada una única especie, en realidad engloba dos: la Rhinoderma darwinii (ranita de Darwin del sur), amenazada de extinción, y la Rhinoderma rufum (ranita de Darwin del norte), clasificada como «en riesgo crítico» y que ya ha casi desaparecido.
La rana, de 3 centímetros de tamaño, fue hallada en las islas de Chiloé, al sur de Chile, por Charles Darwin en su recorrido por el mundo en 1834. El fuego forestal, el cambio climático, las especies invasoras y la urbanización han perjudicado los bosques húmedos del sur de Chile y Argentina, lugares donde suele residir la ranita de Darwin.
Fragmentación de bosques impacta a la ranita de Darwin
Charif Tala, líder del Departamento de Conservación de Especies del Ministerio del Medio Ambiente, sostuvo que la deforestación en los bosques de Chile ha causado que la cantidad de habitantes en Chile y Argentina se reduzca a 62. Según el ministerio, el monitoreo de las poblaciones de ranas se inició en años recientes después de una disminución significativa.
Andrés Valenzuela, administrador de la ONG chilena Ranita de Darwin, una organización no lucrativa dedicada a la protección de los derechos de las ranas, manifestó su deseo de que el proyecto promueva un mayor entendimiento de la complicada situación de la rana en todo el país.
Imagen: Pug1979/Dreamstime/IMAGO
«Tenemos grandes expectativas de que esto mejore la conservación… y que los habitantes de nuestro país empiecen a valorar estas especies singulares e importantes que poseemos en nuestros bosques autóctonos», afirmó Valenzuela.