Con una emotiva y exitosa ceremonia, se llevó a cabo el ascenso a cinturón amarillo de los niños y jóvenes de la Escuela de Taekwondo. El evento, realizado en el marco de la clausura de este ciclo de formación, fue una oportunidad para reconocer los avances y logros de los estudiantes en esta disciplina marcial, que fomenta tanto el crecimiento físico como el desarrollo de valores como la disciplina, la perseverancia y el respeto.
La ceremonia de ascenso estuvo bajo la supervisión del maestro Arturo Muñoz, cinturón negro 8 DAN de la Federación Colombiana de Taekwondo (FCT), quien destacó la importancia de este tipo de eventos para fortalecer el espíritu deportivo de los jóvenes. Muñoz, con su amplia experiencia y conocimiento en taekwondo, fue el encargado de evaluar y promover a los estudiantes conforme a los reglamentos establecidos por la World Taekwondo (WT), organización internacional que regula esta disciplina.
Durante el evento, los padres de familia jugaron un rol fundamental, ya que fueron ellos quienes entregaron los diplomas de ascenso a sus hijos, en un acto cargado de orgullo y emoción. Ver a los pequeños y jóvenes recibir sus nuevos cinturones fue un reflejo del esfuerzo y la dedicación que han puesto en cada entrenamiento. Además, la ceremonia destacó no solo el progreso técnico de los estudiantes, sino también su compromiso con los valores del taekwondo: la disciplina, el respeto, la perseverancia y la humildad.
El ambiente durante la ceremonia estuvo lleno de entusiasmo y apoyo, con familiares y amigos celebrando los logros de los nuevos cinturones amarillos. La Escuela de Taekwondo se consolidó como un espacio de formación integral, donde los estudiantes no solo aprenden las técnicas de este arte marcial, sino también lecciones importantes sobre el trabajo en equipo, la autoconfianza y la capacidad de superación personal.
Este ascenso marca un hito en la trayectoria de los niños y jóvenes que forman parte de la escuela, quienes, guiados por la experiencia de sus instructores y con el respaldo de sus familias, continúan creciendo tanto en el ámbito deportivo como en el personal. Con este evento, la Escuela de Taekwondo reafirma su compromiso con la formación de niños y jóvenes no solo en habilidades deportivas, sino también en valores que perduran más allá del tatami. La comunidad sigue creciendo y celebrando los avances de sus futuros campeones, quienes continúan marcando el camino hacia un futuro lleno de logros y éxito.
