
Lo que debía ser una noche de música y diversión terminó convirtiéndose en una tormenta mediática para dos altos ejecutivos de la empresa tecnológica Astronomer. Durante el concierto de Coldplay en Boston, la noche del miércoles, el CEO Andy Byron y la directora de Recursos Humanos Kristin Cabot fueron captados por la Kiss Cam dándose un beso que rápidamente encendió las redes sociales.
El hecho no habría causado mayor revuelo de no ser porque ambos están casados… pero no entre sí.
El video, grabado por asistentes al concierto y difundido en plataformas como X, TikTok e Instagram, no tardó en viralizarse. Incluso el propio Chris Martin, vocalista de la banda, comentó el momento desde el escenario con un espontáneo: “Oh, miren a estos dos”, mientras sonaba Viva la Vida.
Más allá del chisme, el episodio ha desatado una ola de críticas en línea, especialmente por tratarse de dos figuras clave dentro de la misma empresa. Los debates giran en torno a la ética profesional, el ambiente laboral y los límites entre lo privado y lo público, especialmente en puestos de liderazgo.
Hasta ahora, ni Astronomer ni los involucrados han dado declaraciones. Sin embargo, la reputación de ambos ejecutivos podría enfrentar consecuencias, en un entorno cada vez más sensible a este tipo de exposiciones públicas.




